Sin lectores
Sin ojos delatores.
Sin estridencia
Sin imprudencia.
Sin ecos hirientes
Sin voces llenas de estupefacientes.
Sin preguntas
Sin respuestas.
Sin agonía
Sin muerte ni pena.
Sin juicios
ni prejuicios.
Sin prosa
Sin verso.
No los necesito...
Mejor fluyo, mejor rezo,
en este silencio que me tiene preso.
¿Para qué buscar ojos o miradas?
¿Para qué desear criticas erradas?
Así soy libre, realmente libre.
¡Y qué más bella libertad que la
de la escritura plena!
Sin voces agridulces,
sin interrupciones,
sin condenas.
A nadie le interesa
Al final...
Esu Emmanuel Gastellum
Comentarios
Publicar un comentario